¿Te gusta trabajar con gente?En la hotelería trabajamos para hacer feliz a la gente. Esto significa que, como directivo hotelero, tienes que entender bien qué quieren tus clientes. Tienes que tener facilidad y sentirte cómodo hablando con tus clientes y con tus empleados.
¿Se te da bien organizar?Congresos, bodas, reuniones, crear nuevas empresas o cambiarle el concepto a un restaurante: en la hotelería te encontrarás con una enorme variedad de proyectos. Pero además, la hotelería no es un trabajo rutinario. Tienes que sentirte preparado para actuar ante situaciones imprevistas.
Un futuro con perspectivas. El turismo sigue siendo el sector económico que, mundialmente, presenta el mayor crecimiento. Pero un directivo proactivo con habilidades comunicativas y sociales tendrá, además de las salidas profesionales de su propio sector, muchas oportunidades en otros tipos de empresa.
¿Te ilusiona trabajar? La hotelería no es un trabajo de oficina. Hay momentos de más trabajo y momentos más tranquilos. Cuando se está inaugurando un gran congreso en el hotel, el director no puede salir fuera para fumarse un cigarro. Trabajar en hotelería requiere, por ello, flexibilidad y entusiasmo.