Todos dedicamos tiempo y energía a dar una respuesta adecuada a una serie de situaciones de la vida cotidiana, intentamos dar lo mejor, como padres, profesionales, amigos..., sin embargo en el ámbito profesional se ha producido un cambio, y la clave para encontar el éxito se encuentra en la gestión de la carrera profesional, ya no depende exclusivamente de dar lo mejor. Resulta sorprendente observar cómo la mayoría de la gente no dedica ni el tiempo suficiente ni ningún recurso en saber cuál es su valor profesional en el mercado laboral.
Hoy en día las trayectorias profesionales son flexibles, va desapareciendo el trabajo para toda la vida y por tanto nada puede ya dejarse al azar ni debe depender de los demás, tenemos que planificar, construir; el que, el como y el donde queremos llegar, alienando nuestro tiempo y energía. Diseñando nuestra carrera profesional alcanzaremos las metas que cada uno nos propongamos.
La primera clave para gestionar con éxito tu trayectoria profesional es conocer cual es tu objetivo, a diferencia de lo que muchas personas piensan, el creer que uno sirve para todo y se adapta a cualquier trabajo no ayuda a trasmitir una idea clara del valor que puedes aportar. Una cosa es flexibilidad y capacidad de adaptación y otra falta de claridad y definición. Un objetivo para ser consistente debe ser realista y por ello alinear tres conceptos claves:
Para alcanzar los objetivos que nos planteemos, debemos conocer las competencias que un puesto y una empresa requerirán, anticipándonos a la demanda y poniendo desde el primer momento todo nuestro empeño en el desarrollo de las mismas, en caso de que estemos ya dentro. Los logros que obtengamos serán la manifestación visible del desempeño que vayamos alcanzando.
También hay que cuidar y mimar nuestra red de contactos-networking. La red de contactos va mas allá de nuestro entorno de amigos, la forman todas aquellas personas con las que compartimos experiencias, intereses u otros contactos, ellos son la clave para identificar nuevas oportunidades, actualizar nuestros conocimientos y ampliar nuestros contactos. Entre un 50% y un 75% de las personas en el mercado laboral encuentran un trabajo a través de contactos. La estrategia para desarrollarlas, es estar abierto, pensar a largo plazo identificando nuevas oportunidades, asumiendo que en este caso la distancia más corta no tiene que ser la línea recta.
Después de cuidar el exterior, debemos tener clara una visión y una misión, hacia donde vas?. No podemos aislar nuestra vida personal de la profesional, si de verdad queremos marcar las pautas de nuestro camino debemos ser capaces de alinear todas las variables, definiendo nuestros valores, nuestra visión del mundo y nuestra aportación, priorizando las decisiones en función de nuestra misión. La visión nos dará la dirección y la misión nuestras metas y así diseñar un camino único que engloba nuestro ámbito personal, familiar, social y profesional, acuñando también valores.
Para continuar avanzando debemos profundizar en el autoconocimiento, “En la economía del conocimiento sólo tiene éxito quienes se conocen a si mismos: sus puntos fuertes, sus valores y como lograr sus mejores resultados” ( Meter Drucker). Realiza tu propio análisis DAFO, cuales son mis propias fortalezas y debilidades, que amenazas y oportunidades me ofrece el entorno. Sólo desde el conocimiento sincero y constructivo de uno mismo podremos avanzar.
Es importante construir nuestra propia marca personal, inclusive valiéndonos de elaboradas estrategias de marketing, una forma de ser y de hacer, creando una imagen y una marca de nosotros mismos a los demás, la marca estará definida por los valores que yo percibo de mi mismo y la reputación dependerá de lo que otros piensen de mi.
Para el director de Grupo Eurohispana, Edison Javier Paspuel, hace falta siempre tener líneas o metas a