Según un estudio de Adecco y de Barceló y Asociados que se llevó a cabo entre el tercer trimestre de 2008 y el mismo trimestre de 2012, se concluye que el nivel de formación es determinante a la hora de conservar un puesto de trabajo.
De los 17,3 millones de personas que trabajaban en España el pasado mes de septiembre, el colectivo de personas con educación superior representa el grupo más numeroso, el 39,4% del total de ocupados, con más de 6,8 millones de personas. Por su parte, las personas con formación primaria suponen el 10% del total de personas ocupadas (1.734.800 trabajadores), mientras que los ocupados con educación secundaria incompleta suponen el 26,5% del total (4.584.400 personas), y los que tienen educación secundaria completa el 24,1% (4.172.600 personas).
Hace algunos años, la mayoría de las ofertas de empleo no requerían una formación excelsa, sino más bien todo lo contrario. La necesidad de contratar personal era incipiente y por ello se 'hacía la vista gorda' o bien se les iba formando sobre la marcha, para conseguir que adquirieran experiencia y un bagaje que les hiciera desempeñar su tarea correctamente. Hoy en día, con el auge de las nuevas tecnologías, los medios de comunicación y profesiones relacionadas con el área científico-técnica, requiere que los profesionales estén cualificados e incluso que su especialización sea mayor a medida que el empleo es más especifico.
Por sexos, según el estudio de Adecco, se estima que en los últimos cuatro años, los hombres han sufrido en todos los grupos formativos la mayor parte de los despidos. Así, el número de varones ocupados ha disminuido un 19,5%, mientras que el empleo en el caso de las mujeres ha descendido un 8,6%. Las mujeres por su parte, debido a la recesión, se han tenido que incorporar nuevamente en el mercado laboral, dejando a un lado las obligaciones domésticas para poder colaborar con un sueldo extra en casa. Respecto a su formación, las mujeres con educación superior han aumentado su ocupación durante la crisis, con 98.600 puestos de trabajo, mientras que el número de varones ocupados con educación superior ha disminuido.
Estar bien formado es por tanto un 'must do' en estos tiempos que corren, así que no dejes pasar ni un minuto más y decídete ya a cambiar tu situación, podrás mantener tu empleo o bien poder dar el salto y buscar uno mejor, pero obviamente sin formación, no hay recompensa.
Fuente: El Economista