Los comerciantes minoristas dan un estudio detenido y minucioso a la imagen y apariencia de sus locales, cómo colocar los artículos el color de las paredes y diferentes secciones, la música e incluso la forma de vestir de sus empleados, de tal manera que se generen más ventas en el negocio.
Pero, sin duda un aspecto determinante en la experiencia del cliente: es el olor. Y es que el aroma que se respire al entrar a un almacen va a influir de forma significativa en el tipo de ambiente creado. Varios estudios han demostrado que el olor puede llegar a hacer que los clientes se queden más tiempo y hasta que compren más.
Investigaciones revelaron que los clientes experimentan un placer con estímulos más intensos manifestados a través de la intención de volver a visitar la tienda.
En la actualidad, existen un sin número de empresas especializadasen el tema y se dedican a estudiar cada caso, determinando el aroma particular que necesita cada tienda con el objeto de aumentar las ventas. El objetivo es brindar un aroma exclusivo y único para cada establecimiento. Sin embargo, es necesario tener mucho cuidado con no agobiar a los visitantes, sino todo lo contrario, tratar de crear un ambiente acogedor para su comodidad.
