En base a los datos más recientes del Ministerio de Cultura y Deporte, el sector cultural en España representa aproximadamente el 2,2% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Si se incluyen las actividades económicas relacionadas con el patrimonio cultural, esta cifra asciende al 3,2%. Además, este sector es responsable de la creación de 690.800 empleos, lo que equivale al 3,5% del empleo total en el país, y comprende un total de 128.741 empresas. A nivel europeo, la industria cultural cuenta con 1,2 millones de empresas y emplea a 8,7 millones de personas, representando el 3,8% de los puestos de trabajo en la región.
En cuanto a América Latina y el Caribe, se estima que el sector cultural contribuye aproximadamente con un 2,2% del Producto Interno Bruto (PIB) y genera alrededor de 124.000 millones de dólares en la región. En Brasil, específicamente, la contribución de este sector a la economía se sitúa en un 10% del PIB nacional. En países como México, Colombia y Argentina, esta contribución varía entre el 2% y el 7% del PIB.
Estos datos destacan la importancia actual de la industria cultural en la economía y, al mismo tiempo, resaltan su potencial de crecimiento. La UNESCO sostiene que las tecnologías digitales desempeñan un papel crucial en este aspecto. Por lo tanto, el emprendimiento cultural se presenta como una oportunidad para muchos emprendedores, ya que permite aprovechar este potencial de crecimiento a través de la implementación de soluciones digitales y la exploración de nuevas formas de crear, promover y distribuir contenido cultural.
El emprendimiento cultural, una forma de innovar en el sectorLa globalización, los avances tecnológicos y la proliferación de Internet han transformado los patrones de consumo y la forma en que las personas se relacionan con la cultura. Además, han abierto nuevas oportunidades comerciales para cualquier individuo, permitiéndoles aprovechar sus habilidades creativas en el entorno digital y desarrollar iniciativas dentro del sector. Esto significa que ahora es posible para los usuarios utilizar sus capacidades creativas en el mundo digital y encontrar formas innovadoras de incursionar en la industria cultural.
Efectivamente, el emprendimiento cultural tiene como objetivo aprovechar esta dinámica cambiante para generar soluciones novedosas en la industria cultural, fusionando innovación y creatividad. Sin embargo, no es suficiente tener ideas; es necesario seguir una estrategia concreta para convertirlas en realidad. Esto implica llevar a cabo un análisis cuidadoso, identificar oportunidades, definir objetivos claros y desarrollar un plan de acción con pasos específicos para ejecutar y materializar esas ideas emprendedoras. El aspecto estratégico es fundamental para transformar las ideas en proyectos tangibles y exitosos en el ámbito cultural.
Hacer un estudio de mercadoEl análisis de mercado es, de hecho, el primer paso crucial para emprender en el sector cultural. Investigar y comprender si una idea puede florecer en el mercado implica conocer las tendencias actuales, las preferencias del público objetivo, los desafíos existentes y los posibles competidores. Es fundamental evaluar si la propuesta tiene el potencial de agregar valor y atraer a la audiencia deseada. Esta investigación proporciona información clave que permite tomar decisiones informadas y adaptar la idea emprendedora para que sea relevante y competitiva en el contexto del sector cultural.
Actualmente, es evidente que los videojuegos se han convertido en uno de los principales medios de entretenimiento, especialmente para los jóvenes. Por ejemplo, según el informe 'Digital Media Trends 2022' elaborado por Deloitte, en Estados Unidos, los jóvenes dedican en promedio entre 11 y 13 horas a jugar videojuegos. Este dato resalta la importancia de comprender los gustos y preferencias del público en general. Para los emprendedores del sector cultural, conocer estos datos puede resultar invaluable, ya que les permite analizar la viabilidad de sus proyectos y orientarlos de manera más precisa a cada audiencia específica. Al adaptar sus iniciativas a los gustos y demandas del público objetivo, tienen una mayor probabilidad de éxito y de captar la atención y el interés de la audiencia deseada.
Ejemplos de emprendimiento cultural con éxitoExisten varias empresas exitosas que se pueden considerar como ejemplos de emprendimiento cultural, ya que combinan la creatividad, la innovación y las nuevas tecnologías. Aquí tienes algunos casos destacados:
Fourvenues: Esta startup tecnológica española ha creado un software de gestión avanzada que automatiza los procesos necesarios para organizar festivales, conciertos y establecimientos de ocio nocturno. Su enfoque innovador ha simplificado y mejorado la planificación y organización de eventos culturales.
WNDR Museum: Este proyecto con sede en Estados Unidos ha reinventado el concepto tradicional de museo, ofreciendo experiencias interactivas e inmersivas donde el arte es el protagonista. Utilizando tecnologías innovadoras, han creado un espacio que catapulta a los visitantes a un mundo de creatividad y exploración artística.
Homo Faber Guide: Desarrollada por la Fundación Michelangelo para la Creatividad y la Artesanía, esta plataforma digital tiene como objetivo impulsar el trabajo de los artesanos europeos. Proporciona a los artesanos un espacio para mostrar y difundir sus trabajos creativos, conectándolos con potenciales compradores y audiencias interesadas en la artesanía tradicional.
Estos ejemplos ilustran cómo la combinación de creatividad, innovación y tecnología puede generar proyectos exitosos dentro del ámbito del emprendimiento cultural.
Fuente: bbva.com
