Los hombres lo han tenido un poco más fácil que las mujeres al momento de conseguir un empleo. Cuatro de cada cinco nuevos empleados que se han incorporado al mercado laboral han sido hombres, resultado que en términos absolutos implica que de los 550.000 nuevos trabajadores, 4440.000 son hombres y la diferencia de esto, es decir los 113.000 mujeres. Se destacan por encima del resto aquellos que tienen Educación Secundaria y Bachillerato o ciclos formativos de Grado Medio.
Estos datos registran un claro distanciamiento a la hora de generar una mayor igualdad entre hombres y mujeres. Sin embargo, existen noticias positivas en lo referente a las incorporaciones laborales por franjas de edades, ya que los mayores de 45 años son los que han generado un mayor protagonismo con un incremento de casi 195.000 trabajadores en los últimos tres trimestres.
A su vez, y en el caso de las mujeres, las menores de 30 años tuvieron más opciones de conseguir un trabajo, ya que casi la mitad de las mujeres que accedieron a un puesto pertenecían a este grupo.
Es por ello, que al analizar esta evolución en función de la edad y de los estudios de los trabajadores, se reconoce que el colectivo con más oportunidades en el mercado laboral fueron los menores de 30 años, es decir aquellos que cuentan con Bachillerato o un ciclo formativo de Grado Medio, con un incremento del 5%.
