A pesar de la pandemia, la inversión en Investigación y Desarrollo (I+D) en España continuó aumentando. Según datos recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE), en el año 2020, España invirtió un total de 15.768 millones de euros en I+D, lo que significa un aumento de 196 millones de euros en comparación con el año anterior.
A pesar de que la inversión en I+D en España continuó creciendo, el ritmo de crecimiento se desaceleró y se situó en un 1,3%, la tasa más baja desde 2016. Aunque esta es la sexta tasa de variación interanual positiva consecutiva, indica que el esfuerzo en I+D de España se está desacelerando, dado que en 2019 tuvo un crecimiento del 4,2%.
Tanto el sector público como el privado han contribuido al crecimiento de la inversión española en I+D, siendo el sector público el que ha destacado con un aumento del 2,4% (aunque inferior al 5,2% observado en 2019), mientras que el sector privado ha crecido muy tímidamente, con un 0,3% (en comparación con el 4% de crecimiento en 2019).
El sector público ha invertido un total de 6.955 millones de euros en I+D, aunque esta cifra aún se encuentra por debajo del máximo previo a la crisis financiera, que se observó en 2010 (con una inversión 99 millones de euros mayor, lo que representa una disminución del 1,4% en comparación con aquel año).
En 2020, el sector privado invirtió un total de 8.813 millones de euros en I+D, lo que representa un aumento del 9% (717 millones de euros más) en comparación con el máximo previo a la crisis (registrado en 2008).
LA CAÍDA DEL PIB DISPARA LA RATIO I+D SOBRE PIB
A pesar de la histórica caída del PIB nominal en 2020 debido a la pandemia de Covid-19 (con una tasa de variación interanual del 9,8%, la más alta entre las 27 economías europeas), el crecimiento acelerado de la inversión en I+D ha llevado a que el peso de esta actividad en la estructura productiva supere significativamente la cifra observada en 2019.
En 2020, la I+D ha ganado peso en la economía española, pasando del 1,25% en 2019 al 1,41% del PIB, lo que supone un incremento de 16 centésimas. De estas 16 centésimas, alrededor del 90% (14 centésimas) se debe a la caída del PIB (efecto estadístico), mientras que las otras 2 centésimas representan un avance real. En otras palabras, si solo se tuviera en cuenta la caída del PIB, la ratio habría pasado del 1,25% al 1,39%, y el crecimiento real de la inversión solo habría elevado la ratio del 1,39% al 1,41%.
Es importante tener en cuenta que el efecto estadístico podría jugar en sentido contrario el próximo año, cuando se presenten los datos correspondientes al ejercicio 2021. Para evitar un retroceso en la ratio inversión en I+D sobre PIB, será necesario que la inversión en I+D crezca más rápido que el crecimiento del PIB nominal en ese año. La previsión oficial del Gobierno es del 7,7%, por lo que para evitar un retroceso en la ratio, la inversión en I+D tendría que crecer a un ritmo superior a esta cifra.
Por primera vez, España ha conseguido superar el nivel máximo de inversión en relación al PIB que se alcanzó en 2010, que era del 1,4%. Sin embargo, se confirma que no se ha cumplido el objetivo del 2% establecido por el Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación 2017-2020 para 2020. Además, la ratio actual sigue estando muy lejos del objetivo del 2,12% para 2027 establecido en la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación 2021-2027.
Fuente: cotec.es
