La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el año 2021 como el Año Internacional de las Frutas y Verduras (AIFV), siendo la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) la entidad encargada de llevar a cabo las celebraciones en colaboración con otras organizaciones y entidades del sistema de las Naciones Unidas.
El AIFV representó una valiosa oportunidad para concienciar sobre la relevancia de las frutas y verduras en la nutrición humana, así como en la seguridad alimentaria y la salud. A pesar de su capacidad para proporcionar nutrientes esenciales, fortalecer el sistema inmunológico y reducir el riesgo de diversas enfermedades, la ONU estima que su consumo no alcanza niveles adecuados.
La variedad de modelos productivos en el cultivo de frutas y hortalizas abarca desde la producción intensiva de hortalizas en invernadero hasta la cosecha de frutos secos en tierras de secano.
España destaca como líder en la producción de frutas y hortalizas en la Unión Europea, contribuyendo con más del 22% de la producción comunitaria y ocupando el quinto lugar a nivel mundial. La producción hortofrutícola se distribuye en todas las comunidades autónomas, siendo Andalucía, Aragón, Cataluña, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Extremadura y la Región de Murcia las más destacadas.
El sector hortofrutícola español se distingue por su alta especialización y capacidad de adaptación a la demanda en términos de formatos y variedades. Sin embargo, enfrenta desafíos, especialmente la crisis de precios que afecta a productos como hortalizas y cítricos.
En España, alrededor de 920,000 hectáreas se dedican al cultivo de frutas y hortalizas, y al sumar las destinadas a frutos secos, la cifra supera los 1.75 millones de hectáreas. La distribución por tipos de cultivo muestra que el 41.7% corresponde a hortalizas, el 32% a cítricos, el 20.7% a fruta dulce, el 3% a frutas tropicales, el 1.6% a uva de mesa y el 1% a plataneras.
Aunque la superficie dedicada a la producción de fruta dulce se mantiene más estable, algunas regiones experimentan una disminución debido a la pérdida de rentabilidad. Por otro lado, se observa un aumento en la superficie destinada a hortalizas y frutas tropicales, mientras que las tierras dedicadas a cítricos tienden a disminuir.
La mayor parte de la superficie destinada a frutas y hortalizas utiliza sistemas de regadío y se encuentra al aire libre. La distribución geográfica de los cultivos abarca todo el territorio español, siendo Andalucía (aproximadamente el 33%), la Comunidad Valenciana (19%), Murcia (12%), Extremadura (8%), Castilla-La Mancha (6%) y Castilla y León (5%) las regiones más productivas.
El Anuario Alimentación en España, elaborado por Mercasa con datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, constituye un recurso valioso para entender este sector clave de la economía española. El anuario recopila estadísticas proporcionadas por las Consejerías de Agricultura de las Comunidades Autónomas, la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), asociaciones sectoriales y Consejos Reguladores de Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas.
Este documento abarca datos esenciales del sector, comercio exterior, producción hortofrutícola en la UE, producción global de frutas y hortalizas, así como información detallada sobre frutas, cítricos, frutos secos, hortalizas, consumo, conservas, vegetales congelados, zumos, patatas fritas y snacks, y denominaciones de origen y calidad diferenciada.
