Las reuniones por videoconferencia con padres y alumnos, los claustros de profesores que teletrabajan, las llamadas en lugar de las visitas... llevan más tiempo para menos información y cuestan más esfuerzo como docentes. Pero, ¿y como estudiantes? ¿Podemos encontrarle provecho a la formación online y hacer de la necesidad virtud?

Si hacemos caso a muchos de nuestros conocidos profesores y sus amargas quejas estos últimos meses, podríamos parafrasear a Sergio Dalma y cantar que “estudiar de lejos no es estudiar. Es como estar formándose solo”.

Y es que el ser humano, al menos el neurotípico, ha evolucionado para responder mucho mejor a la relación directa y física con profesores y colaboradores.

Una mirada, una sonrisa dirigida explícitamente a ti, una palmada en el hombro o incluso una llamada de atención negativa, puede suponerlo todo en un mal momento y conseguir esa conexión casi mágica con una asignatura o una oposición que se nos estaba quedando grande.

Las reuniones por videoconferencia con padres y alumnos, los claustros de profesores que teletrabajan, las llamadas en lugar de las visitas, llevan más tiempo para menos información y cuestan más esfuerzo como docentes.

CONSEJOS PARA ESTUDIAR ONLINE DE MANERA FÁCIL Y PROVECHOSA

Pero, ¿y como estudiantes? ¿Podemos encontrarle provecho a la formación online y hacer de la necesidad virtud? Vamos a intentarlo con unos consejos que hemos encontrado en los que coinciden la mayoría de los expertos en formación, desde universidades, empresas de negocios, academias de cursos y postgrados y los propios estudiantes.

Elegir el curso online que mejor se adapte a nuestras necesidades

Para empezar es importante, claro, saber cómo elegir el curso online más indicado. Busca a ser posible formaciones con clases virtuales en directo, porque generan mejores rutinas y mantienen la cabeza centrada en la materia de forma similar a acudir a clases de forma presencial.

Disfrutar de la experiencia del aprendizaje en grupo

Gran parte de esa interacción más “humana” de la que hablábamos se mantiene si no nos limitamos a los libros y a los ejercicios individuales y si experimentamos la satisfacción del grupo. Esa sensación que mejora ciertas películas en el cine, esa ventaja del teatro sobre las series en casa y ese impulso que te lleva a dar la mano al despedirte de tu compañero de asiento cuando aterriza el avión es también nuestra aliada a la hora de aprender.

Normalmente este servicio de los mejores másters online se complementa con chats en directo y pizarra virtual, que siguen abundando en esa sensación de estar ahí que tanto echamos de menos en el confinamiento.

Ver el curso como si de un juego se tratase

Otra arma contra el postergar las tareas o la mayor ansiedad que sufrimos con la distancia es puramente psicológica y consiste en ver el curso online del que se trate como un juego contra uno mismo, un desafío de superación.

Marcarse unos objetivos siempre viene bien

Plantéate objetivos por semanas, date premios cuando los cumplas (mejor que castigos, que llevan a círculos viciosos poco productivos) y piensa en que ahora tienes más flexibilidad para dedicar más atención ahí donde más lo necesitas. Ten cuidado con hacerte trampa a ti mismo: lo que más te cuesta es lo que más tienes que trabajar, no al revés. Tu yo del futuro te lo agradecerá.

Vive tu momento lectura

Otra cosa que podemos vivir como un regalo es la vuelta a la lectura. Si hablamos y escuchamos menos, usemos el tiempo restante para introducir algo nuevo, o aumentemos el tiempo de lectura de materiales en profundidad.

No tenemos por qué ser unos ascetas ni negar la tecnología o la reacción rápida de las redes sociales, pero permitámonos también la concentración, seamos egoístas y evadámonos en algo que nos enriquece solo a nosotros y que no tenemos que demostrar a los demás a cada minuto. Formarnos es como estar en forma física o como cuidar nuestra salud. Se ve desde fuera, pero los frutos que aprecian los demás son a medio y largo plazo, mientras que nosotros nos beneficiamos desde el primer minuto. Cuando lees no eres de nadie y no tienes que dar explicaciones a nadie.

¿Y si saber más sobre tu sector profesional deseado no fuera una obligación, sino un placer?

Vamos a predicar con el ejemplo y te emplazamos a otra entrada para que leas con calma más consejos sobre estudiar a distancia. En el siguiente artículo te contamos más detalles sobre cómo organizarse y cómo elegir másters de nuestro interés.

Te esperamos.

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